El período de poda de árboles
Es esencial planificar cuándo podar los árboles. La poda puede realizarse durante todo el año, salvo los períodos de movimiento de la savia, que se manifiestan por brote o caída de hojas en árboles de hoja caduca.
El final del otoño y el invierno es lo más recomendable
Lo ideal es podar justo antes de que la vegetación vuelva a crecer en primavera, pero está claro que las empresas de poda de árboles en Boadilla del Monte, no pueden reducir su trabajo de invierno a este período. Además, debe evitarse el período de brotación, cuando el árbol tiene que movilizar todas sus reservas para aumentar su masa foliar o para florecer. Por lo tanto, el final del otoño y en invierno son los períodos más elegido para la poda de árboles.
Ventajas de podar árboles en invierno
Según los profesionales en poda de árboles en Majadahonda se desconoce el impacto real de las heladas en la poda de árboles. Sin embargo, esta temporada ofrece varias ventajas:
- El árbol está en reposo vegetativo y sus reservas naturales se mantienen.
- La ausencia de hojas en las especies caducifolias: es más fácil evaluar las intervenciones de la poda a realizar y evitar tener que retirar grandes cantidades de vegetación.
- Es menos probable que la corteza se desgarre que cuando se poda en verde.
Desventajas de podar árboles en invierno
La poda de árboles en invierno, durante los períodos de fuertes heladas, es arriesgada y la falta de seguridad para el podador no es el único inconveniente:
- La curación del árbol: El árbol no puede curar las heridas de la poda, que permanecerán viva hasta la primavera siguiente. Estas heridas pueden ser una fuente de enfermedades y de infestación por plagas y hongos.
- Los verdes (ramas de fuerte crecimiento) o los brotes (rebrote después de un corte) aparecen con mayor frecuencia en el lugar del corte o en la parte superior porque las reservas almacenadas en las raíces, la base del tronco, etc., se salvan de la poda. Por tanto, la reacción del árbol es más vigorosa y a menudo requiere una segunda poda para eliminar los chupones.
Podar cuando la cicatrización es rápida durante la temporada de crecimiento
La poda durante la temporada de crecimiento se denomina alternativamente poda en verde o poda de primavera. Se realiza cuando el árbol está «en savia», es decir, en su período de crecimiento.
Ventajas de podar árboles en verde
A diferencia de la «poda seca» en invierno, la «poda verde» puede iniciarse en cuanto se forman las primeras hojas y se completa a finales de agosto, antes de que el árbol empiece a perder su savia.
Según los expertos en poda de árboles en Torrelodones, esto tiene varias ventajas:
- La formación del tejido cicatricial comienza más rápidamente y el árbol pone inmediatamente barreras químicas que compartimentan la madera y la protegen de agresiones externas como hongos, bacterias e insectos.
- También tiene el efecto de limitar la aparición de chupones en los árboles vigorosos (cerezo, arce, etc.).
- Forma parte del mantenimiento rutinario de la poda arquitectónica (para reducir su tamaño). Sólo debe realizarse en los brotes recientes, durante el verano antes de que la madera se endurezca y, a veces, una segunda vez después de la caída de las hojas. Este mantenimiento sólo puede mantenerse cada dos años. De este modo, el árbol tiene suficiente tiempo para curarse antes de los otoños húmedos y los inviernos fríos.
- La madera muerta es claramente visible.
Es obvio que la poda en verde debe ser ligera para no perjudicar al árbol mientras está en plena vegetación y no afecta a la estética del árbol, ya que los cortes con los extractores de savia son apenas visibles. El objetivo suele ser aligerar el follaje (el nuevo crecimiento) mediante el adelgazamiento de la copa (la parte aérea de un árbol) y, en el caso de la poda arquitectónica, acortar las ramas.
Desventajas de la poda árboles en verde
La poda en verde permite perfeccionar el modelado del árbol, pero tiene algunos inconvenientes:
- La presencia de hojas en las ramas aumenta el volumen de vegetación que hay que eliminar después de la poda.
- Este período puede coincidir con la liberación de esporas de hongos dañinos.
¿Es necesario evitar el calor cuándo se poda árboles?
El calor es un momento estresante para un árbol y la formación de heridas lo expondría aún más a la deshidratación.
Por otro lado, la exposición repentina del tronco a los rayos del sol puede provocar quemaduras en la corteza fina (tilo, castaño, cerezo, arce sicómoro, tulipán, etc.).
Por supuesto, quitar el follaje es una forma de reducir la transpiración de una planta cuando se hacen esquejes, por ejemplo: en el caso de la poda es mejor dejar que el árbol se regule por sí mismo. Un déficit hídrico provocará el pardeamiento o incluso la caída de parte del follaje y la aparición de madera seca que puede ser retirada posteriormente.
Los árboles recién plantados a veces tienen el tronco rodeado por una tela de arpillera ligera para evitar las quemaduras del sol. Esta protección se deja durante dos años siguientes a la plantación y se aplica inmediatamente después de salir del vivero.
No recomendamos podar las ramas del árbol en el momento de la plantación y hasta que la recuperación esté asegurada, ¡aunque esta práctica es habitual!
¿Cuándo podar los diferentes tipos de árboles?
A raíz de las observaciones realizadas en determinadas especies, se recomiendan períodos en función del tipo de poda.
La poda de los árboles frutales no se realiza al mismo tiempo que la de los árboles forestales, la de árboles caducifolios o árboles coníferos, por ejemplo. Sin embargo, tienen sólo un valor indicativo y deben adaptarse a la carga de trabajo del podador profesional, a la situación geográfica en función de si los inviernos son más o menos rigurosos y los veranos calurosos o moderados.
Poda de árboles de hoja caduca
- Arce, roble, carpe, abedul, olmo, aliso, cerezo, castaño, salix, haya, fresno, tilo, olivo, etc.
- En el período de inactividad justo antes del invierno: Octubre, noviembre y diciembre.
- En el periodo de vegetación: Marzo, abril y mayo.
Poda de árboles coníferos
Pino, abeto, cedro, fitzroya y todas las coníferas. Durante todo el año, preferiblemente cuando la cicatrización de la herida sea más rápida, evitando el periodo de subida de la savia: Octubre, noviembre y diciembre.
Árboles frutales de hueso
Cereza, ciruela, etc. Es ideal podar los árboles frutales tras el final de la cosecha: Agosto y septiembre.